La Matanza de Acentejo

La Villa historica de La Matanza de Acentejo se encuentra situada en el norte de la isla de Tenerife, Islas Canarias.

Nuestro municipio forma parte de la comarca de Acentejo y toma su nombre de una de las grandes batallas de la Conquista y que significó la mayor derrota de las tropas castellanas. El espacio que ocupa dibuja una ladera que, partiendo por encima de los 1.500 metros, tiende a moderarse y finaliza en un corte del acantilado.

Fiestas Patronales
Las Fiestas Patronales del municipio se celebran en torno al 6 de agosto, en honor a los patronos El Salvador y Ntra. Sra. del Rosario, con una rica variedad de actos culturales, deportivos, musicales y de ocio, que brindan al visitante la oportunidad de conocer la faceta más lúdica del matancero.

Destaca también la celebración cada 17 de enero de la festividad de San Antonio Abad, patrono de los animales y la cabaña ganadera, en torno al cual se articula una novena religiosa que se prolonga durante los tres domingos siguientes, acogiendo en el segundo la famosa Octava Ganadera, una de las ferias ganadera más antiguas de Canarias. Los visitantes acuden al templo y alrededores a vivir una fiesta cuyo origen se ha llegado a situar en los años posteriores a la Conquista, y en la que la tradicional bendición del ganado y las ofrendas al santo por las promesas cumplidas constituyen sus señas de identidad.

Antigua Iglesia del Salvador

Junto a las ya citadas, cada barrio celebra sus pequeñas fiestas vecinales, como son las de Guía, Cruz del Camino, San Blas o El Caletón, destacando por tradicionales y peculiares las Navideñas y las del Corpus Cristhi. Las primeras incluían hasta hace muy poco la representación del Baile del Niño cada nochevieja en la parroquia, un tajaraste transmitido de padres a hijos y bailado sólo por hombres bajo el ritmo de un tambor, una tradición en vías de recuperación. En cuanto al Corpus, cuya confección de alfombras de flores y tapices de otros materiales surge en el siglo XX, destaca una singular tradición conocida como “Los Cuarteles” y surgida a partir de 1936, consiste en la confección en el interior de la parroquia de monumento florales con forma piramidal, elaborados por vecinos de cada uno de los barrios matanceros durante un periodo de ocho días, contados a partir de la confección de las alfombras. También en el ámbito religioso, la celebración de la Semana Santa no debe pasar desapercibida para el visitante, ya que la misma también se vive con intensidad en el municipio, especialmente el Vía Crucis de la madrugada del viernes.